Crucero por el Lysefjord desde Stavanger

Stavanger es principalmente visitada para conocer el Lysefjord y por su cercanía al Preikestolen. En un solo crucero de la compañía Rødne podrás disfrutar de ambas atracciones. Aunque no podrás subir al Preikestolen, sí lo podrás ver desde abajo (aunque nosotros no tuvimos esa suerte). ¡Allí va nuestra experiencia del crucero por el Lysefjord desde Stavanger!

CRUCERO POR EL LYSEFJORD DESDE STAVANGER

A las 10 estábamos listos en el precioso puerto de Stavanger. Aunque el tiempo no nos acompañó, ansiábamos subir al barco para poder ver por primera vez un fiordo. El día amaneció muy nublado y con lluvia intermitente. Desde que nos levantamos sabía que no era el mejor día para hacerlo, pero la reserva no permitía cambios y había que ir sí o sí.

El barco era bastante pequeñito comparado con otros barcos que realizan tours por los fiordos. Aun así era muy cómodo y no le faltaba de nada. ¡Incluso tenía servicio de bar! Aunque nosotros no lo pudimos aprovechar demasiado, para contemplar las vistas lo mejor es salir a la parte exterior de delante y dejarse llevar “a lo Titanic”.

Desde que arrancamos se disculparon por las malas condiciones. El día era horrendo para realizar ese crucero por el Lysefjord desde Stavanger. ¡Y más si pretendíamos ver una roca que estaba a 600 metros de altura con las pedazo de nubes que había a menos de 50 metros! Como compensación, nos ofrecieron café y té de forma gratuita. Eso no arregló nada ni hizo que saliera el sol, pero el detalle estuvo ahí.

A medida que te vas acercando a los puntos de interés, suena una campanita y una chica te lo va comentando para que salgas al exterior y lo aprecies mejor. El trato de la empresa con nosotros nos pareció muy cercano. En todo momento se preocupan por el bienestar del cliente y están a disposición para todo lo que necesites.

El fiordo es simplemente espectacular, de los más bonitos de Noruega. Pese al mal tiempo, nos quedamos enamorados del Lysefjord y de todos los pueblecitos que lo rodeaban.

Efectivamente, no pudimos ver el Preikestolen. Y eso que el capitán se paró un rato para ver si las nubes se iban, pero duraron hasta al cabo de dos días. ¡Incluso nos costó verlo desde la cima el día siguiente!

El crucero hace varias paradas: una para alimentar a unas simpáticas e inteligentes cabritas. Cuando oyen el barco bajan como un cohete por el valle para disfrutar de un buen tentempié. También para justo debajo de una cascada enorme. Literalmente te mojas. Además recogen agua para que la pruebes (aunque ese día no pudimos hacerlo porque se había mezclado con la de la lluvia).

El crucero por el Lysefjord desde Stavanger dura aproximadamente unas tres horas y cuesta 450 coronas (unos 50 euros aproximadamente). Eso sí, ¡bien amortizados! Aunque te aconsejamos reservarlo el mismo día o el día antes, especialmente fuera de la temporada de verano, para que puedas hacerlo con buen tiempo, cuando todo luce mejor.